11 de julio de 2013

Ya no vuelan.

Imaginar mil formas de volar no significa que vayas hacerlo, soñar con mil ciudades no te hace ver que quizás la más tuya la tengas a tan solo segundos, anhelar los kilómetros que fundan la distancia sin saber que no hay nada que separe recuerdos. 
Promesas que duran horas y memorias que se quedan por años; ilusiones tontas en cabezas cuerdas; regresos que te hacen pensar más de la cuenta. Personas que creen conocerte y aún no saben como es esa sonrisa tuya después de un abrazo, o ese brillo verdoso después de haber llorado durante horas disimulado con la sonrisa más amarga que recuerdes.
Las apariencias engañan, el amor ciega, ilusionarse duele... Y yo, yo soy la misma con mil vueltas al mismo círculo, a la misma rutina, la de querer y seguir en el mismo sitio, en el de hace ya demasiados recuerdos.
Pd. Todo ha dado demasiadas vueltas; último aviso y las palabras ya no vuelan.